El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, comparó este sábado durante una entrevista con el portal The Daily Caller las acciones de China con las de la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial comentando los planes del Gobierno del país asiático de imponer las leyes de seguridad nacional en Hong Kong.
De acuerdo con el diplomático, China actualmente “está apretando su control sobre Hong Kong, ya que busca convertirse en la mayor y única potencia mundial, lo que, en cierto modo, es comparable a las acciones de Alemania durante la Segunda Guerra Mundial”.
“Las promesas, que el Partido Comunista de China hizo en su tratado con el Reino Unido [sobre la transferencia de la soberanía de Hong Kong a China] y las cuales rompió cuando tomó la decisión de negar a las personas de Hong Kong las libertades que les habían prometido, son similares a algunas de las promesas que se incumplieron en los tiempos en que Alemania avanzó contra el resto de Europa”, declaró Pompeo.
Posteriormente, Pompeo señaló en un comunicado que “Pekín en los últimos días ha mostrado su continuo desprecio por la verdad y su desprecio por la ley“.
“Los esfuerzos de propaganda del Partido Comunista de China —que busca comparar las acciones de EE.UU. a raíz de la muerte de George Floyd con la continua negación de los derechos humanos y la libertad básicos por parte del Partido Comunista— deben verse como el fraude que son”, agregó el alto cargo.
En respuesta a las declaraciones de Pompeo, el editor en jefe del periódico chino Global Times, Hu Xijin, recordó que el gigante asiático “no libró ningún guerra en 32 años, mientras que EE.UU. ha luchado continuamente en cuatro continentes”, además de retirarse de “varias agencias de la ONU que ayudan a lograr la paz mundial” y de comenzar una “guerra comercial sin precedentes”. “¿Quién se parece más a la Alemania nazi?“, se preguntó Xijin.
Protestas en Hong Kong
Desde mayo, se han estado llevando a cabo protestas en Hong Kong contra el proyecto de ley de seguridad nacional, que busca prevenir, detener y sancionar acciones en ese territorio que amenacen la seguridad del país y abarca actividades secesionistas y subversivas, así como injerencias extranjeras y terrorismo.
El pasado viernes, el presidente de EE.UU., Donald Trump, afirmó que Hong Kong “ya no es lo suficientemente autónomo” y anunció que dio órdenes a su Administración para que comience el proceso de eliminación del trato preferencial concedido a ese territorio.