Las diferencias entre grupos políticos no sólo están en el PRI, en todos los partidos se cuecen habas como se dice coloquialmente y de esa manera encontramos que en el Partido Acción Nacional un grupo firmó, sin el consenso necesario, una carta para construir una alianza con el PVEM a favor de Eduardo Ramírez.
De inmediato se hizo presente la molestia de otra fracción que asegura que la carta emitida en este sentido no es representativa, porque el PAN tiene sus bastiones y no por estar en los últimos lugares de preferencia en la última elección de la entidad tienen que estar de “regalados”.
Además, con esta carta, se le adelantaron a la dirigente Janeth Ovando, que como siempre andaba cazando moscas porque finalmente sirve a otros intereses y ni cuenta se dio que militantes de su partido se salieron del carril.
Juan Carlos Cal y Mayor Franco, consejero político de Acción Nacional, considera que ir en alianza con el Verde no es lo más viable porque hay muchos inconformes con la continuidad de ciertos políticos, lo afirma y lo dice con conocimiento de causa, pues es uno de los funcionarios de esta administración más cuestionado por no cumplir en temas de cultura.
Aunque tiene razón en algunos cuestionamientos, sobre todo los relacionadas con la pregunta de ¿Por qué adelantarse sin antes analizar si la alianza es positiva o no para el blanquiazul?
¿Por qué llevar a un candidato; y por qué uno; Eduardo Ramírez? ¿Por qué no encuentran cobijo en otras fuerzas políticas?, ¿Por qué Morena pintó su raya?, ¿Por qué el PRI ya tiene prácticamente candidato, ¿Por qué el Verde se queda solo?, ¿o por qué y a cambio de qué?, incluso ¿Qué puede ofrecer el PAN?
En fin, lo que realmente deberían analizar los partidos políticos es: qué quieren los ciudadanos y a partir de ahí elegir a sus candidatos a puestos de elección popular. Sin duda, la experiencia para gobernar es un anhelo y demanda constante de quienes vivimos en el estado, es decir, no más experimentos.
