Seguramente has visto millones de imágenes de cómo son los espermatozoides, los cuales tienen una cabeza ancha y una larga cola que les ayuda a moverse, aunque esta no es su única función.

Investigadores de la Universidad de York, en Reino Unido, indican que la cola de los espermatozoides se encarga de transmitir información para que se doble y nade hacia el óvulo.

Indicaron que con base en estudios de hace aproximadamente 50 años, se sabe que la cola está formada por un sistema complejo de filamentos, conectado por resortes elásticos que se asemejan a la estructura de un cilindro. Por años, los científicos creyeron que dicho sistema daba a la cola un andamio que le permitía nadar en un ambiente hostil hasta uno nuevo.

No todo es lo que parece

Sin embargo, los investigadores han encontrado que este sistema no sólo ayuda a mantener la estructura de la cola, sino que también permite que se mueva y doble de forma única.

“Los flagelos de esperma con este tipo de estructura interna se pueden ver en casi todas las formas de vida”, explicó el doctor Hermes Gadêlha, biólogo matemático del Departamento de Matemáticas de la Universidad.

Añade que aunque la cola de los espermatozoides tiene una estructura interna que se conserva en la mayoría de las especies, todos tienen movimientos diferentes para llegar al óvulo, lo que sugiere que su estructura no contiene toda la información de cómo hacen su movimiento de flexión de la cola.

Estructura de la cola

Anteriormente Gadêlha y su equipo de colaboradores habían desarrollado una fórmula matemática que observan la forma rítmica en que los espermatozoides se iban moviendo, pero ahora lo que necesitaban era saber qué sucedía dentro de la cola.

Para ello, los científicos examinaron cómo las diferentes partes de la cola se doblaban y hacían que se moviera aun cuando el espermatozoide estaba muerto.

Con un movimiento que comenzó en la cabeza del esperma, se originó una curva al otro lado llamado “fenómeno de contrapunto”, lo que indica que la información mecánica se transmite a través de las bandas elásticas interconectadas con el fin de crear movimientos de flexión para formar un modelo matemático que ayudará a plantear una hipótesis sobre los desencadenantes necesarios que la cola requiere para hacer estos movimientos distintos.

“El mecanismo de una cola de esperma crea primero, un movimiento deslizante entre los filamentos dentro de esta estructura dispuesta cilíndricamente, resultado finalmente en una flexión de la cola, un poco como el pistón que convierte el movimiento hacia adelante y hacia atrás en la rotación de la rueda del tren”, indicó Gadêlha.

El especialista concluyó que el movimiento de esta compleja secuencia parece ser capaz de activar el movimiento a través de as distintas partes de la cola.

(Con información de El Universal)