Lennyn Flores/Ultimátum
TGZ
La educación sexual es un tema que los niños y las niñas deben aprender en casa, por esa razón, los padres y madres de familia deben hacer a un lado el tabú y los prejuicios, declaró la psicóloga Gestalt, Leticia Pérez.
Dijo que, al establecer un vínculo de comunicación de esta naturaleza con los hijos, ellos podrán crecer con más seguridad y sobre todo, no podrán ser vulnerados por personas que busquen dañarlos.
En este contexto, dijo que es necesario que los padres y madres estén informados para que de forma clara y precisa expliquen a sus hijos este tipo de temas, haciendo a un lado las ideas erróneas que se tienen sobre la sexualidad.
Detalló que la educación sexual se trata de dar la información precisa a los menores, como: los nombres de las partes de cuerpo, ya que ellos tienen que aprender a conocer su anatomía. También es importante –dijo- enseñarles los procesos del cuerpo y de los órganos sexuales: Pene, vulva y senos.
Asimismo, habló sobre la importancia de trabajar con la autoestima y la comunicación, para que aprendan a conocer su cuerpo y cómo cuidarlo.
“También es importante enseñarles a expresar sus emociones, porque generalmente, siempre queremos evitar que lloren o que se enojen; pero cuando son pequeños ellos están aprendiendo a regularlas y nosotros no debemos detenerlos”, dijo.
En este sentido, exhortó a los padres de familia a informarse a través de profesionales, talleres; incluso, a través de internet, siempre y cuando se tenga un uso correcto de esta herramienta, pues la intención es dar lo mejor a los menores.
La especialista, dijo que al haber este tipo de comunicación dentro de las familias, los menores son menos propensos a ser víctimas de algún tipo de abuso de índole sexual.
Al respecto, recordó que, el mayor número de casos de abuso sexual se han registrado dentro de las familias o en espacios a donde los menores acuden con frecuencia (escuelas, cursos…), por lo que, además de la información a los hijos, los padres deben estar bien informados y alertas a cualquier tipo de actitud sospechosa.
Dijo que se considera como abuso sexual: el tocamiento de genitales, pedir que los niños se quiten la ropa, introducir objetos (penetración), enseñar pornografía y/o utilizar a los niños para hacer pornografía.
