Lennyn Flores/Ultmátum
TGZ
Aunque las ventas han mejorado y las banquetas del centro de Tuxtla Gutiérrez se ven transitables, es urgente que el gobierno municipal reinicie los operativos de vigilancia, toda vez que, en células pequeñas, el comercio informal está haciendo presencia, advirtió Miguel Ángel Camacho, expresidente de la Cámara Nacional de Comercios y Servicios Turísticos (Canaco ServyTur) en la capital.
Recordó que meses atrás el ayuntamiento instaló un grupo de seguridad privada para evitar la entrada a los comerciantes informales, pero desde que se marcharon, algunos ambulantes se han introducido al primer cuadro. Comentó que las autoridades no deben confiarse ante un fenómeno tan fuerte como el ambulantaje porque después será más complicado volver a retirarlos.
“Ya hay presencia de los ambulantes que estaban antes, ya están saliendo a las calles, pero ahora, mandan a sus vendedores, entre 10 o 15 jóvenes para vender sus productos, tanto de fruta, ropa y piratería; de todo. Son las mismas personas… porque el ayuntamiento ya no hace los operativos. Tenían una policía privada que se encargaban de vigilar de 8:00 a 6:00 de la tarde, ahorita ya no lo hacen”, dijo.
Camacho, recordó que antes de que los ambulantes fueran retirados, el comercio formalizado sufrió una baja en sus ventas del 80 por ciento, lo que llevó a muchos negocios a cerrar sus puertas y en el menor de los casos, recortes de personal.
“Porque no nos podíamos poner al mismo precio con los ambulantes; ellos no pagan impuestos, seguro social, luz y/o renta, entonces esos impuestos el comercio organizado los paga, ahí es donde nos golpeaban fuertemente.”
Hasta la fecha, han venido recuperándose, por lo que las ventas han llegado al 60 por ciento, sin embargo –opinó- la autoridades no deben bajar la guardia ante esta problemática que, de no atenderse, tiende a agudizarse.
Por último, reiteró el llamado al edil capitalino, Fernando Castellanos Cal y Mayor, para que los operativos se sigan realizando, pues mencionó que contar con calles limpias y transitables son un aliciente, no sólo para que la ciudadanía se acerque al primer cuadro, sino para que este sea un atractivo para los turistas que arriban a la ciudad.