Sony anunción el jueves que su renovado perro robot Aibo llegará a Estados Unidos.

El nuevo dispositivo podrá usar sofisticadas cámaras y sensores para mapear tu casa, por lo que podrá moverse fácilmente e ir por su cuenta a la estación de carga. Asimismo, reconocerá hasta 100 caras distintas y recordará interacciones pasadas con las personas.

Estas nuevas características, sin embargo, no serán baratas: un paquete del perro robot costará US$2,899. La preventa comienza en septiembre, con la distribución a tiempo para las festividades. El nuevo robot se exhibirá ante el público estadounidense solo en un lugar antes de que salga a la venta: la Sony Square, en Manhattan, a partir del viernes y hasta el 14 de octubre.

El Aibo de Sony se encuentra dentro de una creciente tendencia de la tecnología de la nostalgia, con muchas empresas dándole nueva vida a dispositivos de hace décadas. Su esperanza es invitar a viejos clientes y generar dinero nuevo a partir de esos productos discontinuados. Nintendo ha sido particularmente exitoso en desempolvar y reempaquetar su antigua propiedad intelectual al crear miniversiones de sus consolas anteriores, como la NES Classic Edition. Nokia, también, ha reintroducido su teléfono 3310 y su otrora popular teléfono banana, pero ambos han resultado más ruido que ventas.

Siguiendo con estos esfuerzos retro, Sony reivivió al Aibo luego de que dejó de vender al perro robot en 2006. Primero, el Aibo fue descartado en los años de vacas flacas de Sony, ya que la empresa necesitó deshacerse de sus proyectos menos exitosos. El resurgimiento del Aibo se produce ahora que Sony ha estado disfrutando de una mejoría en sus negocios, con ganancias que se recuperan gracias a las fuertes ventas de la PlayStation.

El perro robot demostró tener una base de fans pequeña, pero muy leal. Después de que Sony cancelara los servicios de mantenimiento para los perros en 2014, muchos propietarios de Aibo gastaron cientos de dólares en reparaciones para mantener a sus mascotas robóticas en funcionamiento.

Aunque este grupo de adoradores del Aibo seguramente generará mucha emoción por el nuevo perro, Aibo se mantiene como robot costoso que cumple pocas funciones prácticas. El perro original, que salió a la venta por primera vez en 1999, se vendía entre US$600 y US$2,000, mientras que el nuevo perro tiene un precio en Japón de US$1,760. El elevado precio debería mantener al Aibo como un producto de nicho. En total, se colocaron 150,000 Aibos originales durante los siete años de ventas.

A pesar del elevado precio, el nuevo perro parece encontrar una demanda elevada, con más de 20,000 Aibos vendidos en Japón desde enero.

El Aibo original le ofreció a Sony una forma de mostrar algunas de sus tecnologías recientes, incluido su sistema operativo patentado y su robótica avanzada. Con los años, los perros se volvieron más sofisticados, y el Aibo es capaz de tomar fotos usando cámaras detrás de sus ojos, reproducir música y decir hasta 1,000 palabras.

El nuevo perro tiene un propósito similar; el nuevo modelo reemplazó el aspecto cuadrado del Aibo anterior con una forma más redondeada y ahora incluye 4,000 piezas, 22 actuadores, ojos de pantalla OLED, el mismo tipo de inteligencia artificial que se usa para los carros autónomos y sensores que le permiten moverse. Con todas estas características, Aibo puede imitar las acciones de un perro real con más precisión, ladra y responde al tacto cuando se le acaricia la cabeza, el lomo y debajo de la barbilla.

El nuevo perro podrá usar el Wi-Fi de tu casa o la conexión inalámbrica de AT&T. Asimismo, Sony se asoció con Amazon Web Services para impulsar las funciones de inteligencia artificial del perro basadas en la nube. Usando la aplicación de Aibo, podrás etiquetar el mapa que genera el perro para que sepa cuál habitación es la cocina o la sala de estar. La aplicación también se puede usar para activar comandos de voz o ver una entrada de video de la cámara del perro, por lo que podrías usarlo como perro guardián.

El Aibo inspiró la creación de muchas otras mascotas robóticas más baratas, pero el mercado para estos compañeros sigue siendo pequeño. Doce años después de que Aibo se discontinuó por primera vez, uno de los pocos dispositivos populares que se puede describir como un robot doméstico es Roomba de iRobot, que es una aspiradora automática, no un amigo robótico.

Se dice que Amazon está desarrollando un robot doméstico, pero sus funciones aún se desconocen. SoftBank Robotics creó un robot humanoide llamado Pepper, pero sólo está disponible en Japón y está destinado a empresas e investigación. Con los altos precios de los robots y funciones limitadas, parece que el futuro con un Aibo en cada hogar sigue siendo poco probable.

Vía CNET