En protesta porque sus demandas no han sido atendidas, los campesinos Eliseo Reyes Gómez, Silverio García Girón y María Josefina Pérez de la Cruz, se extrajeron sangre e hicieron pintas en las paredes de las oficinas de la Comisión Nacional de Derechos humanos (CNDH), ubicadas en esta ciudad.

Junto con unas 50 personas de diferentes agrupaciones, estos tres campesinos se encuentran en plantón en la Plaza Catedral de San Cristóbal desde el 28 de mayo pasado para exigir una tarifa justa en el cobro de la energía eléctrica, cancelación de órdenes de aprehensión y que “cesen la persecución y el despojo de tierras y agua”, entre otras demandas.

Los tres campesinos acudieron al medio día a las oficinas de la CNDH, afuera se extrajeron sangre con jeringas y luego escribieron en la pared de la casa situada en la Avenida Josefa Ortiz de Domínguez: “Justicia”, “respeto al territorio” y “tarifa justa en el precio de la luz”, al tiempo que otros de sus compañeros protestaban con mantas.

Pintas

Silverio García Girón y María Josefina pertenecen a la Asamblea Nacional y Estatal de Usuarios de Energía Eléctrica, y Eliseo Reyes al Frente Popular Ricardo Flores Magón. Una vez que se extrajeron la sangre e hicieron las pintas en el edificio, los tres regresaron al plantón en la Plaza Catedral.

“Realizamos esta protesta por la cerrazón del gobierno en sus tres niveles”, declaró Víctor Hugo Pérez Hernández, uno de los dirigentes de los inconformes.

“Si en los próximos días no hay un llamado de las autoridades, incrementaremos el nivel de las protestas”, advirtió.